Infantil, Exploración.
19 de diciembre de 2021
Por: Leticia Covarrubias
Asistentes: Gely Hernández, Gerardo Bocanegra, Rita y Faridy Santinelli, Ricardo Rivero, Teresa Covarrubias, Lupita y familia, Jazmin y familia, David Creollo y familia, Marco Olvera, Víctor García y Paty, Jannú y Leti Salazar.
Nos reunimos en lo que antes era conocido como “Parador Azteca" a las 10:00 am y de ahí nos fuimos hacia el Parque Joya la Barreta, al llegar a la entrada, algunos dejamos los autos y otros decidieron bajarlos hasta el estacionamiento donde están las palapas. El día estaba frio y con una llovizna que persistió todo el día. La familia de Lupita y Jasmín habían llegado un día antes y habían acampado ahí, así que nos habían apartado la palapa que esta hasta el fondo (es la mas amplia y tiene los baños cerca también). Según sus comentarios y por mi experiencia es un lugar muy agradable y seguro para acampar.
El asador que estaba dentro de la palapa estaba un poco prendido y Leti y Jannú (según me acuerdo), pusieron a calentar un café y el desayuno-comida. La mayoría decidimos que para comer consumiríamos local, así que fuimos con la señora que esta a la entrada del parque a encargarle unas enchiladas. Algunos decidimos que aunque estaba lloviznando podíamos hacer la caminata al mirador, otros decidieron quedarse a convivir y botanear un rato. Leti y Jannú habían llevado sus bicicletas para hacer algo de ruta, Jannú si se fue un rato a explorar en su bici. Las rutas están muy marcadas y la del mirador es una caminata de 30 minutos de subida y mas o menos lo mismo de bajada.
Un poco mojados llegamos a la palapa y fuimos a ver si ya estaban nuestras enchiladas, después de un rato de espera nos avisaron que ya podíamos ir por nuestra comida, misma que devoramos en menos de lo que canta un gallo. Para bajar la comida nos fuimos a romper las piñatas de los niños y la de los adultos, afortunadamente ya se había quitado la llovizna y nos permitió convivir, he de decir que los niños no han perdido su habilidad para ganarle a los adultos los dulces de las piñatas, tienen una habilidad y valor para aventarse que da miedo. Antes de irnos Gerardo Bocanegra nos tomo unas fotos aéreas con su dron. Después de esto recogimos nuestras cosas y como a las 16:00hrs emprendimos el regreso a Querétaro.
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