Presa Batán, Corregidora, Qro, México

Media montaña tipo D

Sábado 9 de septiembre de 2023

Integrantes: Elsa Ortiz, Leticia Covarruvias No asistieron no socios (invitados).

Reta: Susana Torres Sánchez (Socio CEMAC Qro)

Guía: Gengis Toledo Ramírez (Socio CEMAC Qro (y Veracruz))

La cita fue conforme a lo planeado a las 10:00 en la Plaza Gran Cué, en el Pueblito Centro, Corregidora, Qro. Nos redistribuios en solo dos autos para ir hacia la Colonia San Francisco de la Corregidora, donde se dejan los vehículos y se procede a iniciar la caminada al lado de un acceso vehicular restringido.

A las 11:00 hrs iniciamos la caminata buscando la vereda que baja directo y corta un buen tramo, sin embargo por lo crecido de la vegetación por las recientes lluvias, no fue posible y preferimos tomar la ruta de terraceria la cuál permite disfrutar mejor las vistas desde arriba iniciando por la caseta abandonada del inicio de la ruta.

Nos encontramos a varios ciclistas desde la tiendita por donde dejamos los vehículos hasta la mitad del descenso, mismos que venian subiendo a pasao lento sobre la pendiente y el sol que ya estaba en su apojeo.

Hicimos una pequeña incursión hacia los arcos, sin embargo dado lo crecido de la hierba preferimos dejar ese intento ya que no íbamos preparados para meternos entre tanta malesa.

Continuams el desenso hasta la derecha de parte baja de la cortina, donde está la rampa o canalización principal de la presa, solo utilizada cuando hay un exceso de agua en la misma. El lugar se encontraba bastante seco sólo con algunos charcos de agua o estanques dado más bien a las lluvias y para nada al uso de la presa. Continuamos hacia las escaleras, no sin antes abrir camino ya que un árbol cayó en el mismo y hubo que cortar algunas ramitas para facilitar el acceso y agacharse para librar las ramas más gruesas. Subimos entonces sin dificultad por las escaleras a la parte alta de la Cortina donde descansamos un momento y tomamos fotos.

Continuamos hacia la compuerta para refrescarnos en la sombra e hidratarnos para luego continuar bordeando un poco la presa hasta donde esta el alambre de puás, acceso que fue sin buen camino marcado. Cabe mencionar que continuar bordeando la presa requiere ir preparado con botas altas y machete para librar matorrales y vegatación espinosa, así como irregulridades del camino. Regresamos hacia la cortina pero esta vez rumbo a la Cueva, que es por el acceso de terracería elevado, mismo que esta vez estaba abierto (de las muchas veces que hemos visitados dicho acceso siempre había estado cerrado). A la altura de "La Cueva" escalamos por el camino de piedra algo suelta para llegar a la Cueva con algo de dificultad pero de no más de 10 minutos de ascenso a paso lente y seguro. Ya en la Cueva, que realmente es solo una boca sin mayores posibilidades de acceso más allá de unos 20 metros, nos rehidratamos, platicamos y descansamos un poco antes de iniciar el regreso. Las vistas allí al igual que en todo el recorrido, en especial en esta época de lluvias, son muy bellas y más pensando que estabamos tan cerca de zonas urbanas.

Al bajar igualmente con algo de precausión la pendiente, que por cierto está bien marcado ese acceso, reemprendimos la caminata por el camino de terraceria de regreso, cuando nos percatamos de una vívora aparentemente de cascabel, que iba atravesando la terracería. La vívora de aproximadamente un metro o más de largo y grueso como el de una muñeca de un adulto se metió en paralelo al camino pudiendo tomarle videos. Es tal su mimetismo y la mala resolución de una foto tomada de un video, que no se alcanza a distinguir la víbora en la foto que se adjunta (para mejor refeencia véase el video compartido en el grupo Social del Club).

Regresamos atravesando la cortina de la Presa por el otro lado, bajando por las piedras y admirando ahora el paisaje desde ese lado, cosechamos algunos garambullos y tomamos fotos de la vegetación, ese camino es moderado en descenso pero tiene tres secciones, primero una pendiente con piedra suelta del cuál hay que cuidarse en no resbalar, luego una sección más moderada con mucha sombra y frutos silvestres, y la última continua el descenso pero ya bajo el sol con mucho pastizal. Al final de estos tramos llegamos a los tanques, al lado de las paredes rocosas donde se conecta con el camino de descenso que tomamos.

Continuamos el descenso por donde subimos pero esta vez tomando los atajos comunes para evitar hacer todo el camino zigzageante bajo el pesado Sol. Cabe decir que los dos atajos tenian vegatación muy crecia en sus partes altas, por lo que tomarlos de bajada no fue práctico, pero si en el ascenso. El segundo atajo presentó un paisaje increíble al voltear hacia abajo, dado lo verde del paisaje y las numerosas flores que alli había, no obstante en el último tramo de ese atajo ya no había vereda visible por lo que sorteamos entre las plantas para salir a la caseta del inicio y de allí tomar un último minitramo que nos saca de la zona federal hacia la colonia que desgraciadamente pasa por un minivertedero de aguas grises. La excursión terminó poco después de lo estimado, a las 13:20 donde dejamos nuestros vehículos, de alli nos acompañamos a la carretera, donde cada quién tomó rumbo distinto.