Asistentes: 15
De Querétaro: David Petterson (socio) con 7 de sus becarios-estudiantes (Alfredo Flores, Alexis Ramírez, Cristóbal Acevedo, Alfredo Monroy, Elberth Velázquez, Eduardo Abel Flores y Ulises Alcázar), Jasmín Illescas (Invitada), Jannu Casanova (socio) y Josafat Martínez (socio y Retaguardia).
De San Juan del Río: Juan Carlos Rodríguez (socio y Guía), Mónica Villalpando (invitada), Roberto Maldonado (invitado), Roberto Pinto (invitado).
Nos reunimos en la casa de David Petterson en la ciudad de Querétaro Josafat, Jasmín, Jannu y los 7 estudiantes y partimos al encuentro con los compañeros de San Juan del Rio: Roberto Pinto, Mónica, Juan Carlos y Roberto y partimos hacia la población de Vizarrón donde pasamos a desayunar unos ricos tamalitos y tacos de barbacoa; fue una parada técnica grata ya que coincidimos con los compañeros de la otra excursión y pudimos deleitar los alimentos con buena compañía, ya desayunados retomamos el camino hacia nuestra aventura “La cueva del agua”. Nos fuimos alejando de la mancha urbana hasta encontrarnos con la maravillosa vista de la sierra; con sus montañas semiáridas y su cielo azul y con pinceladas caprichosas de nubes.
Poco a poco nos fuimos acercando a la comunidad de Rancho Quemado, parecía que llegamos a otro planeta, Marte, por citar un ejemplo, a como nos lo pintan las películas, pues la cadena montañosa de ese lugar tienen un particular tono rojizo y sus paredes son elevadas y escarpadas.
Llegamos pronto a nuestro destino donde Juan Carlos, nuestro guía en turno fue a buscar a dos lugareños para que nos apoyaran con la guiada dentro de cueva, nos dirigimos a la entrada de la cueva donde un hermoso cañón o algo similar a ello nos sirvió de antesala , allí nos encontramos con una que otra mariposa monarca que bajan hasta esta parte de la sierra y contemplamos una especie de cueva en las paredes rocosas , producto de la actividad minera en la zona, al poco rato nos encontramos subiendo la ladera y nos encaminamos a la cueva, previa organización de la exploración donde se acordó que Roberto Pinto y un lugareño serían nuestros guías y Josafat y el otro chico de allí de la comunidad nuestros retas.
Antes de ingresar a la cueva Roberto Pinto coloco las cuerdas, aseguro las mismas y nos dio indicaciones, nos segregamos en grupos más compactos para efecto de identificarnos de manera rápida y corroborar nuestra permanencia en el grupo, así también verificamos nuestro equipo; casco, lámparas, mochila de ataque y cubre-boca … y empezó la aventura, nos fuimos adentrando a la cueva de uno en uno hasta llegar a la primer cámara de la cueva donde el guano pegado a las paredes rocosas daba un aspecto ahumado y raro. Mientras avanzamos nos encontramos con todo tipo de formas y caminos, había ocasiones que andábamos a gatas y otras cómodamente en pie, otras veces escalábamos rocas o descendíamos entre lajas y suelo arenoso, cosa que ayudo bastante cuando pasábamos a gatas.
Después de unas dos horas de camino en las entrañas de la tierra llegamos un tanto acalorados, pero felices al punto acordado y motivo del nombre de este bello sitio, una laguna, que a simple vista y con la ayuda de los reflectores y lámparas nos dejaba ver su tono cristalino azul-verdoso donde pudimos refrescarnos un poco y recordar nuestra época de infantes, pues dadas las condiciones del suelo y con el revoltijo que hicimos al meternos se empezó a tornar un poco lodoso y nos dio motivos para perder noción del tiempo en una guerra de lodo, donde las risas, el compañerismo , el gusto y respeto por la naturaleza confabularon para disfrutar de esta bella excursión.
Al terminar de darnos un buen chapuzón y uno que otro resbalón, porque aquí, como en la casa de jabonero, “el que no cae, resbala” nos dimos la tarea de merendar un poco para recuperar energía y retornar a casa.
Narró experiencia: JASMÍN ILLESCAS
Minutas del Guía: Los horarios aproximados que tuvimos desde que salimos de SJR y Qro. fueron similares (07:00) y nos reunimos ambos grupos a las 07:45 frente a Banamex de Ezequiel Montes….a las 09:45 llegamos a Higueras (de ahí en adelante es pura terracería) y en Adjuntas de Rancho Quemado nos encontramos con una de las “novedades” para visitar la zona o entrar a la cueva; nos cobraron $20 de “cuota” por coche. A las 10:30 llegamos a Rancho Quemado y Roberto Pinto me recordó que teníamos que avisar al Comisariado, al cual buscamos, su nombre es Eliseo, quien, a las 11:30 nos asignó a dos guías de la comunidad capacitados muy recientemente para esta actividad “ecoturística”. Con estos guías (Víctor y Fredy Villada) continuamos en los 3 vehículos hasta la base de la ladera donde se ubica la cueva, cosa que el año pasado era imposible por las rocas que había en la hoy terracería que arreglaron para visitar la cueva y la mina de mercurio. Al llegar y estacionar los autos, nos registramos en la Carta responsiva y ya casi listos, y con los guías locales, que nos cobrarían una cuota de $50 por persona, recordé al grupo, que como David no entraría a la cueva, yo lo acompañaría en una exploración por el cañón, y designé a Roberto Pinto como Guía y a Josafat como Retaguardia; ambos conocen la cueva y, además, los guías locales son “obligatorios”. Hecho este pequeño ajuste, a las 12:30 empezó el grupo de 15 excursionistas cemaquer@s a entrar a la cueva y David y yo hicimos un recorrido muy ligero para regresar a las 15:30 a los autos, tomar una siesta a la sombra de las paredes del cañón y escuchar el clásico “aullido” uu-uu a las 16:40 cuando salió el primer cuevero del agua.
Ya afuera de la cueva y antes de cambiar de ropa, se pagó la cuota al guía local de los 13 cemaquer@s que entraron a la cueva. En Ezequiel Montes se dio la cuota de los 4 invitad@s (Pinto, Mónica, Roberto y Jasmín) para el club. Cabe señalar que a los “chavos” de David, aunque vayan como invitados, el club no les cobra.
P.D. Gracias a tod@s por haber asistido y por cada detalle en el que colaboraron para el buen desarrollo de esta excursión…Felicidades Jasmín por tu excelente reseña. Gracias Rober por el apoyo en equipo, logística e “invitar las cocas” a tod@s.
Comments