Sábado 31 de septiembre y domingo 1 de septiembre de 2024
Guía: Víctor García González
Retaguardia: Joe
Asistentes:
Alex (invitado), Diana, Ericka Hernández, Guillermo (invitado), Leticia Covarrubias, Polen
Reseña realizada por Diana Ruiz de Santiago
Las travesías que organiza Víctor son lindísimas y es una lástima no tener reseñas de ellas, así que en esta ocasión me voluntarie para hacerla. Mis fines de semana de agosto estuvieron destinados a disfrutar a mi sobrino, por lo tanto dudé mucho en ir a esta excursión, pero desde hace mucho tiempo no iba a alguna travesía y pensé que ya era necesario. Creo que las excursiones comienzan desde el momento que tienes que sacar el equipo y empacar todo; uno de los retos de estas excursiones es limitarte a llevar lo necesario, cada objeto extra significa que lo tendrás que cargar ese peso extra los dos días, pero también es cierto que algunas cosas te hacen tener una experiencia más cómoda como el colchón inflable, la estufita para tomar café caliente por la mañana…
La mayaría de los asistentes salieron de Querétaro el sábado a las 6:30 am, Polen tuvo que ir por trabajo a CDMX antes que llegar al destino, Memo y yo salimos de Toluca. Los que venían de Querétaro tomaron la ruta indicada en el proyecto (carretera 57 con rumbo a CDMX, se salieron en Tepeji del Rio con dirección a la Presa de Taximay, de ahí se dirigieron a Villa del Carbón, y “bajaron” a Llano de Lobos). A mi Víctor ya me había comentado que teníamos que llegar por el norte de Llano de Lobos, pero en un momento Google Maps no sugirió una ruta 12 minutos más rápida y la tomamos, esa ruta si llegaba por el norte de Llano de Lobos, pero no por el norte de Villa del Carbón; después de 15 minutos decidimos regresar a la carretera principal por la que íbamos porque había muchísimos baches… No tuvimos señal en gran parte del trayecto, pero afortunadamente al llegar a Llano de Lobos vimos de lejos al resto del grupo, llegamos a las 10:00 a.m.
Cada uno tomó los alimentos que llevaba para el primer lunch, caminamos un poco a la presa, nos acomodamos muy bien en unas rocas para comer y Víctor apagó sus velitas por sus 50 años en un rol de guayaba con queso (su cumple no fue ese día, pero queríamos comenzar a festejarlo). De ahí caminamos unos 300-500 metros y llegamos a la primera cascada, la contemplamos, tomamos unas fotos y regresamos a los coches. Ahí agarramos las mochilas y comenzamos la travesía a las 11:45 a.m.
Después de caminar 45 minutos aproximadamente encontramos otra cascada, aunque en Google Maps estaba marcado un poco más adelante, creemos que esa era la Cascada Puente de la Luna porque no vimos otra cerca. Tomamos algunas fotos, continuamos caminando y a la 1:10 p.m. aprox llegamos a uno de los primeros valles (¿El Contadero?) que vimos que en la ruta; aprovechamos para sentarnos, descansar y comer un poco. Ahí Lety encontró un hongo rojo que le llamó mucho la atención y no perdió la oportunidad de sacarle fotos (era un hongo de plástico jaja una tapa de plástico aplastada). Nos estábamos poniendo muy cómodos, así que decidimos levantarnos antes de que nos diera más pereza continuar. Seguimos caminando entre el bosque, nos fuimos encontrando hongos, helechos, algunas zonas se vean como zonas que se reforestaron hace muchos años porque todos los árboles se ven más o menos del mismo tamaño. Llegamos a un tipo peñón desde donde se escuchaba el agua, teníamos que bajar un poco para ver la cascada de Cahuacán así que dejamos las mochilas debajo de un árbol enorme. Bajamos un poco, encontramos un lugar de donde salía agua súper cristalina y fresca, continuamos bajando y llegamos a la cascada a las 2:50 p.m. Regresamos por las mochilas, y seguimos con nuestra ruta.
En algunas zonas el suelo estaba un poco húmedo/lodoso y por lo tanto resbaladizo; logramos evitar algunas caídas al irnos sobre las zonas más secas, pero en una de esas zonas Memo se tropezó y calló, afortunadamente no se pegó en la rodilla, pero si se pegó en un vasito debajo de la rodilla. Kiki lo exploró, limpio, colocó diclofenaco y vendó, ¡mil gracias! Porque eso ayudó para que pudiera seguir caminando. Pasamos por otros valles muy lindos, Polen me ayudó a cargar un rato mi mochila (mil gracias!), a las 4:10 llegamos a un valle que se está marcado como Presa reventada. Ahí descansamos, comimos, y de ahí Polen emprendió su regreso a Llano de Lobos. Él no llevaba su equipo de acampar porque se tenía que regresar a Querétaro el domingo muy temprano. Normalmente nadie se regresar solo, pero en este caso Víctor permitió que Polen se regresara sólo porque es Polen (se orienta súper bien, es muy fuerte y se llevó un radio). Ahí también tuvimos que decidir que hacíamos, si Memo y yo nos regresábamos con Polen a Llano de Lobos por la lesión, si nos regresamos todo o continuamos como estaba el proyecto. Memo comentó que después de descansar el dolor en la rodilla no era tan fuerte y que podíamos continuar con el plan. Sólo Víctor encaminó un poquito a Polen, regresó al grupo y seguimos caminando.
En el proyecto estaba que pasaríamos a la Peña Ojo de Venado (un mirador), pero como ibamos un poco atrasados sólo buscamos un valle en donde pasar la noche. Pasamos por un par de valles que eran buena opción, pero también quería queríamos avanzar lo más que se pudiera. Llegamos a un valle muy amplio a las 6:35 p.m. y decimos montar el campamento ahí, caminamos por la orilla porque estaba muy mojado en el centro y encontramos una zona un poco menos húmeda en una orilla. Había pronóstico de lluvia por la tarde del sábado, pero Tláloc fue compasivo con nosotros; nos dejó llegar a armar las tiendas, cenar sin lluvia y sólo llovió un poco por la noche. El plan de prender fogata no se hizo porque ya estábamos cansados y preferimos dormir temprano, pero gozamos del lugar donde estábamos, rodeados de oyameles abies (“arbolitos de navidad”). El primer día caminamos aprox 13 km, con un desnivel de 467 m.
Durante la noche la temperatura bajó un poco, creo que a 5-8 o, pero creo que nadie pasó frío. Despertamos, quitamos campamento y desayunamos. Pasó un local de la zona y le preguntamos si nos recomendaba algún punto para tomar agua y nos comentó que había un depósito ahí, a un lado del Valle. Le fuimos a buscar y si lo encontramos, el agua estaba cristalina y fresca (es el agua que baja para la comunidad), aprovechamos para rellenar nuestras botellas, camel bags… (Ubicación: 19° 36.0946', -99° 28.4588) si le agregamos 1 gotita de microdyn a cada litro de agua. A las 8:50 ya teníamos las mochilas puestas para seguir nuestra travesía, (a tiempo! En el programa estaba que salíamos a las 9:00 a.m.).
Nota: Las fotos de las tiendas son de Je
Víctor quería encontrar el camino que nos llevara a la Peña Ojo de Venado, primero tomamos un camino muy bien marcado y pensábamos que ese nos podría llevar a la Peña, pero no, cuando sentimos que nos estabamos alejando nos detivimos para tomar otra dedición, tomar la ruta con mayor desnivel pero que probablemnte nos iba a llevar a la altura que teníamos que estar para continuar a los otros mirados o regresar por el camino bien marcado por el que veníamos. A Memo ya le dolía un poco la rodilla, Joe lo ayudó a cargar su mochila para que tuviera menos peso y así no se lastimara (mio mil gracias!). Ya sin el peso de la mochila decidimos que lo mejor era tomar ese subida para “acortar” un poco. El bosque se veía hermoso, con arboles súper altos, el suelo lleno de musgo… al principio en sendero se veía más marcado, pero poco a se fue cerrando. Kiki y Memo se encargaron de ir abriendo camino, haciendo las ramos a un lado (Joe nos dijo la palabra correta para describir eso, pero ya no la recuerdo). En algún momento empezamos a ver más el cielo, pensamos que ya estabamos cerca de encontrar la ruta correcta para llegar a la Peña y continuar a los otros miradores, pero nos estabamos tardando mucho y ya ibamos atrasados, así que Victor decidió regresar al camino principal por donde habíamos comenzado a subir.
Ya en al camino principal avanzamos más rápido, llegamos a otra intersección de caminos. De ahí Víctor estimada que teníamos que caminar 8 km para llegar a Llano de Lobos, teníamos que seguir sibuendo un poco porque teníamos que pasar por los mirados. También de ahí había otra opción para regresar a los coches; caminar 2 km sobre un camino principal por donde pasan coches, bicis…. llegar a un lugar que estaba marcado con Truchas Cielito Lindo, confiar que de ahí conseguímos un raid a Quinto Barrio o Cahuacán (ahí ya pasan taxis y transporte público), llegar a Villa del Carbón y de ahí encontrar otro transporte para llegar a Llano de Lobos. Afortunadamene era la 1:15 p.m. aún nos quedamos varias horas con luz y a pesar de tener que dar una vuelta grande decidimos que para no seguir lastimado la rodilla de Memo, no retrasar al grupo por ir más lentos lo mejor era que Memo y yo tomáramos la segunda opción. El camino a la Trcuhas estaba súper bien marcado, estaban pasando varios ciclistas, yo había descargado el mapa sin conexión… consideramos que era seguro regresarnos “solos”. Nos despedimos y el resto del grupo continúo con la travesía como estaba planeada.
En el camino a las truchas nos encontramos con unos ciclistas que hasta se ofrecieron a llevar la mochila de Memo al siguiente pueblo para que no tuviera que cargar más, pero rechazamos la ofeta porque no sabíamos exactemente a qué punto ibamos a llegar. Llegamos al lugar de las truchas en 40 minutos aproximandamente. Ese día nosotros caminamos 9 km aprox. Al llegar le preguntamos a un chico si alguien no podía dar raid a la carretera pero no nos dio una respuesta claras, así que entramos a la tiendita y volvimos a preguntar. Una pareja que estaba sentada en una mesa escuchó nuestra petición y se ofreció llevarnos a la cerretra después de que terminaran su comida, nos invitaron a sentarnos con ellos. En ese lugar tienen unas cabañas, una casa de árbol con una cama matrimonial, hamacas… creo que puede ser otro lugar para dejar los coches e inciar otra ruta. Aprovechamos para comernos unas ricas quesadillas de champiñones y una trucha. ¡Mil gracias Luis y Karla!, nos ahorraron tener que caminar mínimo 1 hora y media más. Karla y Luis iban a Nicolás Romero, a la dirección contraria a Villa del Carbón; nos dejaron en una parada de transporte cerca de Cachuacán. Preguntamos en que micro nos teníamos que subir, esperamos a una que pasada por Villa del Carbón. No tuvimos que esperar mucho y nos cobró $40 por los dos. Nos bajamos hasta el centro de Villa del Carbón, buscamos un taxi que nos llevara a Llano de Lobos; el primero no quiso llevarnos porque según él probablemante había una ruta cerrada, pero el segundo si aceptó llevanos por $230 :) En el camino a Llano de Lobos hay una vistas muy lindas. Llegamos a los coches a las 6:00 p.m. y tuvimos la grata sorpeta de ver a resto del grupo ahí, tenían poco de haber llegado. Afortundamnete a pesar del cansancio todos llegaron muy bien y disfrutaron de unos miradores padrísimos en su camino de regreso. Caminaron uno 10-11 km más desde el punto en que nos sepramos, la decisión de tomar la otra ruta fue muy acertada. A Joe relive le marcó que la travesía fue de 26.4 km, con 1640 m de desnivel.
Aún nos esperaban unas 2:30-3:30 horas de regreso a casa, pero teniamos hambre, así que comimos en el restaurante de Llano de Lobos. Disfrutamos de la comida, charla y nos despedimos. Nosotros decidimos tomar la autopista de Chamapa para regresar a Toluca, era un poquito más larga pero pensamos que era más segura. En el camino a nos tocó muchísima lluvia y a los que iban a Querétaro les tocó bastante trafico en Pedro Escobedo, llegaron a las 11:00 p.m. aproxiamndate a Querétaro, pero llegamos bien y felices despué de un fin de semana lindísimo.
Yo no me arrepentí de dejar de ver a mi sobri un fin de semana porque me encantó pasar otro fin de semana rodadeada de árboles, dejar más de 24 horas el celular en modo avión, enforcarme a ir disfrutando las vistas, los tonos de verde y aunque uno traiga mil cosas en la cabeza, esos lugres ayudan a estar un poquito en más calma.
Víctor, mil gracias por tan linda travesía y a todos los socios les recomiendo ir a alguna travesía organizada por él, eso sí, antes de ir a una, es mejor probar con una salida más corta. Gracias a todo el grupo por su compañerismo! Joe, Alex y Kiki que sin conocerlos, ayudaron a Memo, gracias a ustedes no se lastimó más; espero coincidir con Uds. pronto en otra salida.
Notas mentales/lecciones de esta salida:
-Bajar el mapa sin conexión de la zona en donde estarás.
-Llevar efectivo.
-Llevar el power bank/batería para poder recargar los celulares y lámparas.
-Siempre llevar el botiquín con vendas, analgésicos…
-Procurar llevar a un paramédico o médico en este tipo de salidas, ¡da mucha tranquilidad!
Notas:
· Si les interesa tener la ruta para poderla seguir me la pueden pedir.
· Para convertir las coordenadas de las ubicaciones guardadas de Garmin a GD (Google maps) pueden utilizar https://www.omnicalculator.com/es/conversion/convertidor-de-coordenadas#como-convertir-coordenadas-de-latitud-y-longitud
Ruta de Joe en Relive
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